A un año de las elecciones, Passarella piensa en volver a
presentarse mientras que en la oposición son varios los que están
en campaña para ir por el sillón.
La carrera ya comenzó y dentro de un año River tendrá un nuevo
presidente hasta el 2017. Como en un maratón, muchos corren sólo
con el objetivo de llegar y no de ser los ganadores. ¿Cómo es
eso? En Núñez hay muchos lanzamientos para medir en las
encuestas, aunque la mayoría sabe que no les da para presidente.
Entonces, la idea es estar, conseguir lugares en las listas y lo
que faltan son las cabezas, los candidatos.
La fecha de los comicios será el sábado 7 ó 14 de diciembre y
Passarella no necesita cambiar el estatuto para ir por la
reelección. Tiene todo en regla para hacerlo, lo que se le fue de
los márgenes es el descenso, el último balance y alguna cosita
más. Sin embargo, el Kaiser cuenta con respaldo de algunos socios
y no se baja de su Mercedes: si Ramón lo ayuda, le sobra ego.
Igual, el aparato oficialista ya se mueve porque varios
integrantes de la CD quieren continuar.
Matías Patanian y Andrés
Ballota, vocales por la minoría, eran parte de la mesa que
también integraba D’Onofrio (compartieron lista en el 2009), pero
decidieron lanzarse solos, a través del frente Ahora River. Otro
que apareció tras ese quiebre es Rafael Aragón, nieto del
recordado Aragón Cabrera (presidente de River del 73 al 83) y
parte de la avanzada donofrista. Y Darío Santilli sigue firme con
sus intenciones: ojo, debe presentarse como presidente o vice
porque ya tuvo tres mandatos seguidos como vocal.
Estos nombres tienen un perfil común, forman parte de una camada
sub 50 de empresarios y profesionales, con ganas de cambiar el
estilo de conducción. De hecho, se espera una elección con mayor
participación que en la anterior porque creen que los jóvenes
tendrán una presencia significativa. En ese sentido, el Frente
Angel Labruna es una fuerza importante basada en la juventud
militante, tentada desde distintos sectores.